Concierto Italiano

Papa y yo hemos estado jugando con las conchas mientras escuchábamos a Bach. Poníamos unas sobre otras hasta que se caían una y otra vez, mientras que sonaba el concierto italiano de Bach una y otra vez.

No es lo mismo hacer torres de conchas con Bach que con Strauss. De Bach se dice que es el músico sin errores humanos y por eso es el músico del siglo XVIII con mayor admiración universal. Sus partituras son conmovedoras.

En vida solo se dedico a responder las peticiones de las liturgias. Tal vez por eso son tan rectas, como lo es toda su época musical. Musicalmente, el consiguió fundir el contrapunto con la armonía.

Dice Aaron Copland que Bach invita a la discusión en otros términos, aparte de los musicales. Estando en París se referiría a la Revolución Francesa. Estando en Bangkok y su agitada actividad cultural, se refiere a poner conchas una encima de otra repetidamente.

El concierto italiano es una de sus piezas maas exuberantes y maas virtuosas. El ultimo septiembre estuvimos escuchándola en El Escorial tocada por una japonesa en clave. De sus delicadas manos, tenia un toque a música de relajación. Lo cual demuestra la personalidad de esta pieza y lo mucho que Glenn Gould, Jacques Loussier y otros pueden diferir en su ejecución.